José Antonio Adell es una de las personas más apreciadas de la cultura popular aragonesa Con 51 años, es escritor, maestro, locutor de carreras y exatleta

Una vuelta por el deporte aragonés

Oro molido en Binéfar

24/09/2006 RICARDO MARTÍ

Adell, en la Iglesia de San Pedro, en Binéfar
Foto:RICARDO MARTÍ

Para el deporte oscense José Antonio Adell es como el oro molido. El binefarense es investigador, conferenciante, maestro, escritor y una persona ligada con el deporte provincial, sobre todo con su querido Centro Atlético Monzón. A este personaje de aspecto quijotesco no se le conocen enemigos y tiene la sencillez, la simpatía y la diplomacia como bandera.

Nacido en el pueblo literano de La Melusa, es el hombre más feliz del mundo con su maravillosa familia. Todos hablan bien de él y su capacidad de halago se desbordó hace tiempo. Con tan sólo 51 años ha recibido una cascada de homenajes, placas, trofeos, premios... Con ese don de gentes que tiene, muchos piensan que arrasaría se entrara en la política. Pero él es feliz en su mundo, rodeado de los suyos, y, con su eterna sonrisa, sigue siendo uno de los que más trabajan por la cultura popular de Aragón.

El último homenaje lo recibió el pasado 16 de septiembre en Alcolea de Cinca. Pero lo que le llegó al alma fue ser nombrado pregonero por el Ayuntamiento de Monzón en las últimas fiestas de San Mateo. La sombra de Monzón es alargada. "Hasta ahora los pregoneros tenían que ser de Monzón o vivir en Monzón. En mi caso no cumplo ninguno de los dos requisitos", insiste con admiración José Antonio Adell. Es un gesto que nunca olvidará, en regalo de generosidad de una población que le respeta. "En el discurso quise resaltar mi vinculación con Monzón desde que a los seis años fui a estudiar a Salesianos", indica gozoso el altoaragonés.

El atletismo

Pep, que es como lo conocen sus amigos, lleva unido al Centro Atlético Monzón desde hace 35 años. "Fui durante 17 años atleta. Después, durante 20 años, técnico de fondo de atletas como Fernando García, Javier Yerno, Carlos Ballarín, José Pallarés, Mónica Saludas, Chicho de la Fuente, Carlos Oriach...", relata el polifacético aragonés.

Ahora trabaja en la localidad mediocinqueña en el mundo de la docencia como director del Centro de Profesores y Recursos. Otra de sus facetas es la de locutor de carreras pedestres. Este año se despide definitivamente de esta faceta. "Lo dejaré en el mes de diciembre en el Cross del Turrón en Monzón. Pero seguiré colaborando en las Carreras de la Solidaridad", afirma el oscense. Los pollos siguen manteniendo su tirón popular. "Están abocados al éxito desde el momento en el que se llevan al centro de la localidad en sus fiestas mayores", reconoce Adell. El literano ha visto pasar a muchos grandes corredores en las corridas, pero en su memoria tiene grabado el nombre de José Molins. "Era de Sabadell, el entrenador de Carmen Valero. Entendió perfectamente la filosofía de estas carreras. Dio espectáculo y se preocupó de que no se perdieran".

Durante el verano, Adell también da charlas de la cultura aragonesa junto a Celedonio García. Ya ha dado 950. "Llevo 25 años con esto. La 500 fue en Tamarite. Ahora damos 60 o 70 charlas al año". Recuerda con especial cariño El Frago, Biescas, Azanuy, Albalate de Cinca, Utrillas, La Puebla de Hijar, Labata, Manzanera, Fiscal, Castejón del Puente, Candasnos, Morata de Jiloca, Bulbuente..."El pueblo más pequeño fue una casa donde está la ermita de la Virgen de las Ventosas, cerca de Aler", recuerda el altoaragonés.

Otra de sus facetas es la de escritor de libros. Junto a su inseparable Celedonio García ya ha realizado 23 libros. "Hemos tenido suerte con la editorial Pirineos. Al principio lo tuvimos más difícil, pero después nos hicimos un nombre, aunque no nos hacemos ricos". Su gran best-seller es Brujas, demonios, encantarias y seres mágicos en Aragón, del que ya han salido cinco ediciones.

El altoaragonés cree que uno de los grandes problemas actuales del mundo del libro es su competencia con internet. "Pero los libros de ocio y las novelas las sigue leyendo gente y el campo está muy abierto".

Moracho

De su quinta es el vallista olímpico Javier Moracho. "Es una persona de muy buen carácter y tiene mucho carisma". Pero Eliseo Martín es su atleta preferido. "De pequeño ya se le veía una gran calidad. Era dócil, muy sencillo, muy sentido y eso la ha ayudado en la vida".

Binéfar es una población de 9.000 habitantes que tiene en las comunicaciones uno de sus problemas latentes. "El motor de desarrollo es el tren, la carretera, el regadío... Pero con la aparición del el AVE, a la linea Zaragoza-Lérida no se le presta interés por parte de RENFE. Se ha cerrado las estaciones de Grañén, Sariñena, Binéfar y el tren solo para en Monzón y Tardienta", apunta Adell.

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